Cada vez somos más los que decidimos no castrar ni esterilizar ni vulnerar su naturaleza. Seguimos sin creernos todas esas estúpidas prevenciones interesadas acerca de lo que les ocurrirá a nuestr@s gat@s, si no les esterilizamos... sencillamente porque todo son !mentiras! La prueba de ello: mis hermosas y sanas gatitas no esterilizadas. Los gatos que se enferman son los estirilizados, los castrados. Unos de enfermedades físicas, otros de tristeza.
¡Feliz Navidad a todos los amigos de este blog!