Gatoterapia y sabiduría gatuna

Si al mirar la fotografía has reído, ya puedes hacerte una idea de lo que significa la gatoterapia. El gato primeramente te hará reir de lo lindo, con sus elevados saltos, sus increíbles acrobacias , sus huidas a toda pastilla por el pasillo con su colita bufada en pos de su pelota de goma espuma... Y esto, en los tiempos que corren, ya puede considerarse bastante beneficioso para nuestro ánimo. Cuando acaricio a mi gata me transmite paz, felicidad y, aunque yo no me dé mucha cuenta, está demostrado, que sentir su suave tacto mientras la acaricio esta reduciendo mi estrés, disminuyendo los niveles de presión sanguínea y frecuencia cardiaca, y su suave ronroneo me proporciona confianza .Pasar tiempo con nuestros gatos produce una sensación de dicha difícil de entender para la gente del montón, que solo ve en ellos una mascota de la que presumir o un medio para librarse de los roedores.Si eres insomne o tienes depresión, un gato te ayudará a dormir y a estar relajado. El gato es un somnífero natural, y si se duerme contigo en la cama (y esto lo saben todos los verdaderos amantes de los gatos), no sé que onda emite que te quedas durmiento enseguida. También está comprobado que acariciar a los gatos reduce el nivel de tensión arterial, y se ha demostrado que la convivencia con ellos reduce el riesgo de infarto. La convivencia familiar también mejora, ya que impulsan la comunicación entre los miembros de la familia, y fomentan en nosostros actitudes serenas. He comprobado que los gatusos huyen de las personas enfadadas. Tienen como "un sexto sentido" que les indica cuando alguien emite "mala onda". Mi gata parece que "huele" cuando ando disgustada por algo, y entonces no le apetece subirse en mi regazo. Solo cuando estoy contenta, ella se sube. Al igual que en terapias con delfines(delfinoterapia) , se ha comprobado su acción beneficiosa en personas discapacitadas y en las que sufren trastornos psicológicos y emocionales, como los diferentes tipos de demencias, el autismo, el Síndrome de Down, la hiperactividad y los desórdenes en la conducta en niños y en la depresión, tanto en adolescentes como adultos y ancianos. Los que hemos tenido la suerte de convivir con gatos durante la adolescencia sabemos que son ideales compañeros precisamente a esa edad, porque se adquiriere compromiso y habilidades sociales al compartir y cuidar del pequeño amigo, en una época de la vida en que a veces se siente especialemente solitaria. También para ancianos reportan una magnífica compañía, estimulando la verbalización de sus recuerdos. Para personas que pasen tiempo solas, Y en general para todas las personas, excepto para niños muy pequeños. Por sentado doy que también tenemos que intentar ser buenos compañeros para ellos, que el beneficio sea recíproco. Me llamó poderosamente la atención que los japoneses (como buenos orientales, siempre rentabilizándolo todo), han puesto la primera casa de relajación (por llamarla de alguna manera) con gatos. Es decir, un lugar donde pasas el rato en compañía de gatos. por supuesto, el cliente decía: solo me quiere porque le doy comida. Pienso que es abusar del minino,que necesita una familia, y no ser un objeto del primero que venga. Como sus pequeñas señales de afecto son muy bien recibidas por sus dueños, son capaces de ayudar a enfermos convalecientes sólo con el mero hecho de estar presentes. Supongo que es la magia animal, que están llenos de divinidad. Me gustaría que tomasemos ejemplo de los gatos, que son tan sabios. Mi gata cuando esta malita, se come la hierba que sabe que se tiene que comer, y sana. Si ella puede, creo que nosotros también. Qué pena que hallamos perdido ese conocimiento intuitivo, ese escuchar los mensajes de nuestro propio cuerpo, que a menudo nos dice: no quiero polivitamínico, yo lo que quiero es vitamina G....